Ir al contenido principal

UN TIEMPO DE AMOR


MUESTRA DE TALLER....etc, etc. Un cierre mas, una pauta mas de trabajo. MUESTRA DE TALLER DE...etc, etc. Parece sólo un trámite burocrático. Parece sólo una formalidad para lograr un final prolijo.
MUESTRA DE TALLER...hay tantas por todos lados en esta época del año.
Y uno supone que puede ampararse en esa naturaleza por las cosas que no salen bien o que estará expuesto a todos los temores posibles por esas cosas, justamente, las que no salen bien. Dualidad, temores, expectativas, la puesta, las actuaciones, las voces, la pulcritud de la banda sonora, etc.
Y sí, una muestra de taller, por mas que se disculpe por sus posibles inexactitudes no deja de ser toda una puesta en escena. Y se merece tanto respeto como cualquier otra puesta de temporada.
Mas, en medio del ruido de los trámites, de las planificaciones, de los ensayos...aparece otro ruido.Un ruido aún mas impetuoso, generoso y a la vez demandante, un ruido que no había sospechado en esa magnitud.
Las risas.
Y son las risas que vienen de adentro, de esos once aventureros que en este año se atrevieron a comenzar un taller de comedia musical sin saber muy bien a que se arriesgaban y que de repente, ahora, tras largos meses de juegos, marchas y contramarchas, están a punto de arremeter dentro del escenario y mostrarse.
Las risas.
En medio del desfile de color, en medio del movimiento, en medio de las vocalizaciones, en medio de los requerimientos de puesta...las risas. Y son risas de niños en cuerpos de adultos, son risas estruendosas en seres que miran a esas dos fechas de muestra con el asombro de quien se enfrenta por vez primera a un escenario y lo ve como a una fábrica de maravillas.
Y es que es eso: una fábrica de maravillas.Dios mío...creo que me había olvidado de eso.
Y las expectativas crecen hasta convertirse en energía. En avasallante energía. En miradas, algunas feroces, otras serenas, algunas divertidas que toman cuerpo y forma en coreografías, en canciones, en escenas. Y hay un entusiasmo, una pasión, unas ganas que hace mucho no percibía.
Pasión...Dios mío, creo que me había olvidado de eso.
Y transcurren doce horas en la ficción.Y apenas 70 minutos en la realidad de la puesta. Y quinientos veinticinco mil seiscientos minutos en mi vida.Un año. Y me reencuentro con la pasión y con la fábrica de maravillas. Me encuentro de nuevo con el escenario.
Y si, es una muestra de taller. Esto que decimos casi displicentes, casi al descuido, es una revelación que no había contado entre mis expectativas. No había contado que una muestra de taller es un cúmulo de ilusiones, de expectativas, de fuerzas renovadas que nos demuestra en un espejo todo aquello que alguna vez tuvimos y que la rutina o las circunstancias fueron desgastando:esa capacidad de asombrarse, de gestionarse, de ser feliz bajo las luces y en un ensayo, esa capacidad de entrega para el juego y la ilusión. La vocación por el descubrimiento de una profesión que tiene mucho de salvadora.
Y por ello, al descubrirlo, supe que tenía en mis manos una gran responsabilidad.
Y estallaron las DOCE HORAS en la muestra del taller de comedia musical. Pero por sobre todas las cosas estallaron los miedos, estallaron las vacilaciones, estallaron las dudas y fueron suplantadas por ese entusiasmo arrollador de estos once maravillosos talleristas que asumieron nuestras DOCE HORAS como una producción de primer orden y que pusieron lo mejor de sí para demostrar una vez mas, parafraseando a Pepe, que aquí Sí podemos hacerlo. Que cuesta, que es difícil, que mas de una vez es incómodo pero que no deja de ser posible. Y sobre todo que no deja de ser posible jugarlo en un contexto de valores humanos que mas de una vez juzgamos perimidos.
He aquí la Muestra: con mayúsculas. Un semillero de talentos y fuerza de trabajo. Un equipo que se reafirma en el hacer y que demuestra que puede hacerlo. Aunque sea incómodo. Pero que deja un sabor dulce por encima de todas las amarguras y los contratiempos y que, amén de afirmarnos como profesionales y abrirnos las puertas para seguir exigiéndonos, nos invita a medir un año de la vida como un tiempo de amor.
Gracias a esta alquimia que logró este pequeño milagro cotidiano. Quizá no sea multitudinaria su respuesta. Pero a nosotros, a mí, me basta.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

SÓLO SI LO CREES

Que cosa con éste blog.  Éste espacio querido que creé allá por 2008 cuando aún no tenía demasiada idea de redes sociales ni de páginas web pero necesitaba difundir mi trabajo y, sobre todo, organizarlo. Comenzó como tal y luego, con la aparición de mi web y otros recursos, quedó como éste reducto en donde volcar sensaciones personales.  Un blog personal, sí. Ya sé, ya sé que vinieron decenas de recursos: Facebook, Instagram, Twitter, etc etc etc. Los he usado a todos. A algunos, todavía los uso. Pero, según pasan los años y según las prioridades y las energías cambian, se hace necesario revisar esas suscripciones y esas participaciones. Y aquí está, mi "cronicario pisciano" con su interfaz simple y sus imágenes nítidas en donde sólo yo puedo escribir y sólo algunas personas comentar. No me molestan sus comentarios, muy por el contrario, los espero con ansias. Pero me temo que necesito éste búnker virtual como necesito convertir mi casa en un refugio de serenidad...

Construir una historia

Se me ocurre compartir un proceso. Se me ocurre que el camino para elaborar mi experiencia actual sea abierto, interrogado y criticado. El proceso de construir una historia  a partir de información parcial, en continuo movimiento y con diversidad de orígenes.  La "dramaturgia del actor" ó mas bien una dramaturgia de laboratorio es un camino que elegí hace algunos años a raíz de la disconformidad que me producía el montaje de musicales de repertorio en el ámbito del taller en donde no era posible respetar la estética de la obra de referencia exponiendo sus noveles intérpretes no sólo a una performance dificultosa y contraproducente sino con referentes que obligaban a la copia más que a la creación. Esta dramaturgia ( que no llega a ser exactamente del actor  puesto que los textos surgen de mí) es una intersección con los jukebox musicals , esos espectáculos de teatro musical construidos en base a canciones preexistentes generalmente de un único autor y sobre las ...

EL INTÉRPRETE DE LA COMEDIA MUSICAL

Un/a excelente cantante. Un excelente actor, una excelente actriz. Un/a excelente bailarín/a. Ninguna de estas artes alcanza a completar lo que el Intérprete de Comedia Musical necesita. Y lo escribo con mayúsculas. Porque se trata de un arte tan complejo y dificil como la misma actuación, como el mismo canto , como la misma danza. El Intérprete de Comedia Musical - o Teatro Musical, en una acepción mas amplia- es una extraña y maravillosa "especie"dentro de las artes escénicas que no es "un poco actor, un poco cantante, un poco bailarín": ha de contar con formación, información y entrenamiento en todas y cada una de estas artes para poder afrontarlas con fluidez técnica, excelencia interpretativa y naturalidad en su hacer. Ha de usar de estas tres artes para generar una nueva y las mismas han de convertirse en recursos que le permitan lograr una sola línea narrativa. El Intérprete tiene que contar una historia. Pues , esa historia necesita de recursos que no i...