Reverendas Canciones

La Reverenda es una especie de espíritu oscuro, antiguo, conservador. Guarda todas las ideas que representan la represión, el miedo y los golpes contra la naturaleza humana. Conduce un convento en donde cada vez son menos las religiosas y en donde las alumnas pugnan por romper los muros con rock & roll. Como es de esperar, la Reverenda está cerca del poder. El poder es Gigí, esa chica caprichosa dueña de medio pueblo que de puro antojo quiere mantener a su lado a Lenny, el músico melancólico, joven y enamoradizo que siente esa relación como un peso en su nuca. Y claro, Lenny necesita quien lo ayude: un personaje atrevido como Gaspar, su mejor amigo que de tanto llevar cartas al convento se enamora de Calvario, la única novicia de la orden y está decidido a sacarla de su claustro a como dé lugar. Lenny cree que esto es un sacrilegio hasta que en su presencia aparece Magdalena, una novicia supuestamente argelina que no habla una palabra de su idioma pero que lo enamora con su sola mirada. 
Dos amigos enamorados de dos novicias y su objetivo: concretar su amor a toda costa. Ahora bien, la Reverenda es un monolito de autoritarismo que vigila y Gigí es un mar en contra. Eso sí, las chicas de la banda rockera son un frente de tormenta contra la malcriada ...sobre todo Tally que con sus once años descubre los primeros indicios del amor...hacia Lenny.

El ímpetu adolescente puede ser una bomba de tiempo en un ámbito represivo. Pero nada será tan desconcertante como las comidas de Stella...una especie de magia que sólo puede revelarse a partir de canciones. Canciones como pasión. Canciones como peligro. 

Escribir esta historia junto con Alejandro Degiorgis para nuestro Taller de Comedia Musical 2012 es  divertidamente complicado. Dicen que es tremendamente dificil escribir una obra de teatro: creo que prefiero no leer esa afirmación hasta tanto haya logrado darle un cierre a estos personajes que no por arquetípicos deben ser menos ricos. Porque sobre ellos es que deben hacer su aprendizaje 14 actores noveles pero fabulosamente entusiastas, constantes y obedientes. Y enlazar estas historias- surgidas por otra parte del trabajo de laboratorio que hacemos desde marzo- con canciones de películas tan inolvidables como REZO UNA PEQUEÑA PLEGARIA ó el TEMA DE AMOR DE CINEMA PARADISO. 

De cualquier manera, al decir de algunos guionistas, estos personajes me están sorprendiendo. Lamento no tener mas tiempo para indagar en todos sus posibles laberintos. 

Pero ese es un trabajo que les planteo a estos nuevos actores como desafío. 

Los esperamos en diciembre para verlos nacer.

Ph: Victoria Carballo